Violaciones, prostitución, homosexualidad, infanticidio y necrofilia. Estos son algunos de los detalles de la vida de los pingüinos Adelaida (Pygoscelis adeliae) que descubrió explorador inglés George Marray Levick durante la expedición de Robert Scott al Polo Sur, que transcurrió en la Antártida largos períodos entre 1911 y 1913. Levick decidió entonces ocultar aquellas hallazgos por temor a las reacciones populares. Cien años después, Douglas Russell, del Museo de Historia Natural de Londres, ha encontrado los tratados y cartas de Levick que revelan estos detalles.